SU BARRICA

Relleno

Durante el primer año de uso de una barrica, el fenómeno de “ consumo ”, debido a la acción combinada de la impregnación de la madera y la evaporación del vino, generalmente representa una pérdida de 7 a 11 litros de vino. Durante los primeros dos meses de crianza, es costumbre rellenar las barricas dos veces a la semana. Después, esta operación se realiza una vez al mes. Durante esta fase inicial de la crianza, la barrica cede al vino una importante cantidad de taninos. Este fenómeno se denomina “ golpe de madera ”. Se atenúa con el paso del tiempo y los taninos se mezclan gradualmente con la estructura del vino.

Trasiego

Las lías más gruesas se eliminan por trasiego. Lavar el interior de las barricas también permite hacer que el vino “respire”. La frecuencia de los trasiegos depende del tipo de suelo y del método de crianza. Tradicionalmente en la región bordelesa, los trasiegos se realizan cada 3 o 4 meses. Después del trasiego, las barricas se lavan con agua caliente teniendo cuidado de preservar las fibras de madera, y luego con agua fría para evitar el desarrollo de microorganismos. Después, deben ser perfectamente escurridas y luego azufradas antes del llenado.